viernes, 14 de noviembre de 2008

Wish you were here

No volviste. Dejaste un remolino de fantasía dentro de mis sábanas. Ya no queda siquiera una pizca de tu olor debajo de mi almohada. Desgarraste mis esperanzas con mordiscos de ambición. Fui tan útil para ti como el pañuelo que he tirado después de secarme las lágrimas. Ya no siento tu pecho oprimiendo el mio, ya no leo caricias en tus ojos. No dibujo el arcoiris con el esplendor de tu sonrisa. No mas besos, no mas abrazos... Nada mas.


5 comentarios:

supersalvajuan dijo...

Pásate al Pink F. de la etapa Syd Barred.

Mal bicho dijo...

Siempre nos quedará paris.

Anónimo dijo...

En fin, qué decirte amiga, no sabes la de veces que he llegado a casa y no he tenido más compañía que el sofá, el paquete de cigarrillos y la botella sobre la mesa, y si acaso, en plena embriaguez, la conversación con el espejo, después de superado el trance daba a luz un poema. Simple terapia. Otro día pasado... y sin hacer la cama.

Vino y besos

Mártir dijo...

Los hombres somos asi, no nos salvamos ninguno...¡cosas de la genetica y de la seleccion natural!...un saludo desde el Sur del Sur...

Cathy Pazos dijo...

Hay algunos que nunca debieron llegar a nuestras vidas, hay quienes deberían entrar pero no nos aptece, pero hay uno que existe, en alguna parte del mundo esperando por ti y con él no necesitarás pañuelo, por que el verdadero amor no entiende de dolor, de lágrimas salvo las de felicidad.

ánimo y muchos besitos.